Hoy fue uno de los días más extraños que he vivido en mi época escolar. Llegué y en la hora de Inglés (que es la primera clase que tengo en el día), el profesor Juan, creo que se llama, empezó a dar un discursito que me pareció familiar, pues creo recordar que ya lo había dado antes.
Empezó a decirnos que nosotros éramos poco hombres y poco mujercitas, ya que supuestamente hablábamos a su espalda, y muchos de nosotros le tirábamos malas vibras, cosa que al menos yo, no siento como tal. Bueno, la cosa es que cuando opine yo sobre lo que me parecían todas estas cosas, noté como que el profesor empezó a cambiar su actitud, y según mi teoría, las opiniones del curso lo hicieron darse cuenta de que estaba hablando puras weas y para hacerse el listo, dijo, al final, que todo se trataba de una broma. JAJA, que gracioso.
También hoy, la Tania, una compañera mía, trató de suicidarse tomando una sobredosis de pastillas. No le pasó nada grave, le lavaron el estómago y sobrevivió, pero nadie puede asegurar que no lo va a intentar de nuevo.
Empezó a decirnos que nosotros éramos poco hombres y poco mujercitas, ya que supuestamente hablábamos a su espalda, y muchos de nosotros le tirábamos malas vibras, cosa que al menos yo, no siento como tal. Bueno, la cosa es que cuando opine yo sobre lo que me parecían todas estas cosas, noté como que el profesor empezó a cambiar su actitud, y según mi teoría, las opiniones del curso lo hicieron darse cuenta de que estaba hablando puras weas y para hacerse el listo, dijo, al final, que todo se trataba de una broma. JAJA, que gracioso.
También hoy, la Tania, una compañera mía, trató de suicidarse tomando una sobredosis de pastillas. No le pasó nada grave, le lavaron el estómago y sobrevivió, pero nadie puede asegurar que no lo va a intentar de nuevo.
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