domingo, marzo 21, 2004

Mirando con el corazón

Vamos, mírame a los ojos y confía en mí, solo tienes que saltar la línea, vamos, sólo requiere de un mínimo esfuerzo tuyo, jajaja, cualquier maldito día te veré nadando en las bahías del infierno, esperando al tic-tac incesante de los relojes, de las alarmas de la justicia, por un número, un boleto para ser atendida por los secretarios del castigo. Pestilencia… madre arreglará todo y lo pondrá en su lugar otra vez, sólo tienes que saltar la línea, es un mínimo esfuerzo, aprende a nadar…


Recuerda esa frase, recuérdala, aprende a nadar, que se jodan tus metáforas de niña feliz auto indulgente, que se joda esta relación disfuncional, aprende a nadar….aprende…madre, por favor, tira la cadena, quiero ver todo arrastrándose por el retrete, no te rindas, no me llames pesimista, ¿acaso un cambio no estaría bien?, no podría creer que no lo quisieras…te quiero ver esfumándote, derritiéndote a través de los poros terrenales, llegando al fondo de la pestilencia misma, dejando todo atrás…

Te invito, amiga mía, a saltar la línea, a cruzar el límite entre la cordura y la locura, te invito a ver mas allá, algo tiene que cambiar, es innegable, pero ¿qué?, la vaga idea me adormece, me idiotiza… relájate, dame la mano, y salta conmigo.

¿Dónde he visto estas imágenes antes?, me parecen familiares, y agradables, pero nada de esto me satisface, nada de esto me hace sentir vivo…seguiré traumándote hasta sentir algo…jajaja.

Amada conciencia, locura, cordura, tristeza, desesperanza, honestidad, desesperación, obscenidad, dame algo a lo cual poder aferrarme mientras los vientos incesantes me arrastran hacia atrás, dentro del límite, fuera de los bordes de la cordura. Estoy, cómodamente loco, sufriendo de largo lapsos, momentos, de horrible cordura….matar es un arte.

Amor, inseguridad, miedo, resentimiento, desesperación, rutina, tranquilidad, paz interior, almas vacías, alegría, felicidad, venganza, llorar, depresión, Lateralus, melancolía, arrepentimiento, mentiras, auto indulgencia, olvidar, recordar, extrañar, asfixiar, importar, preocuparse, querer, cuidar, gritar, resistir, sobrevivir, crecer, encerrarse dentro de uno mismo, cariño, cansancio, esperar…necesito más sentimientos bellos…como renacer, esperanza, honestidad, verde agua, azul, proclamar; morir, elogiar, apreciar, admirar, compartir, sinceridad, incomprensión, martirizarse, bromear, morir, revivir, elevarse, evolucionar, crecer, progresar, aprender, drenar, observar, vigilar, poseer, quitar, dar, imponer, oscurecer, aclarar, limpiar, borrar, rehacer, intentar una y otra vez sin darse por vencido, sangrar, herir, traumar, castigar, enjuiciar, sanar, perdonar, disculpar, nadar, flotar, caminar por el mismo camino juntos, soñar, idealizar, imaginar, creer, creer en uno mismo, reír, abrazar, besar, llamar, conversar, dialogar, debatir, pelear, reconciliar, aconsejar, consolar…

Para cada una de estas palabras tenemos una historia distinta, un momento y un recuerdo distinto, no podemos simplemente fingir que entre nosotros no existe nada que nos une, pues, ambos sabemos que no es así, ambos sabemos que por mas que tratemos de disimularlo, por mas que tratemos de hacernos los indiferentes, basta una sola mirada casual, accidental, ocasional, para que cualquiera de estas palabras, cualquiera de estos sentimientos se nos venga a la mente.

Solamente necesito tiempo, solamente necesito tranquilidad, paz, necesito solamente encontrarme con mi yo interior, con mis miedos, con mis inseguridades y con mis dudas de una vez por todas y eliminarlas, acabar con ellas…no para que volvamos a intentarlo otra vez, no para que otra vez nos esforcemos por ser lo que realmente estamos destinados a ser, no para fingir nuevamente que somos dos felices amigos, sino que para empezar de una vez, para crear, por fin, el camino que nos llevará a ese lugar que siempre hemos soñado, por eso Nicoll, a dos días de tu cumpleaños, te ruego paciencia, te pido, con mis mas sinceros deseos, que seas paciente por un tiempo, que esperes a que por fin mi mente confusa, se aclare.

Te deseo lo mejor, sabes que es cierto, no son simplemente palabras, deseo que seas feliz, deseo que alcances de una vez tu felicidad, tu grosera felicidad, jeje, admito que alguna vez fui un obstáculo, pero ya no lo soy, Nicoll, te he dejado libre, ya nunca más te lo impediré, no te preocupes por mí, por favor, el silencio realmente me está sanando por dentro, estos últimos días te he sentido mas liviana, quiero que sepas que ya no tienes que preocuparte más por mi, me puedo cuidar solo, gracias, de todo corazón por haberme protegido por tanto tiempo, de qué forma mejor te lo puedo agradecer, que dejándote ser libre, qué mejor “gracias” que un “sé feliz”…


Para que estés tranquila, no tengo ningún resentimiento hacia ti, ningún sentimiento negativo, ningún rencor, aún eres una persona muy importante para mí, y con respecto a lo del otro día, a esa conversación por MSN, pues, quiero que sepas que me hizo bien, muy bien, te agradezco tus palabras, así que no te sientas mal por ellas, se que no lo haces, y está bien, pues, de cierta manera, realmente, luego de haberlas leído, sentí una especie de paz interior, de tranquilidad, que no había sentido hace mucho tiempo.

Nicoll, no te prometo nada, no te prometo lugares idílicos ni bellas expresiones de cariño, no te prometo una amistad de aquí a un tiempo más, no te prometo miradas profundas ni ocultas, no te prometo felicidad, no te prometo tiempos mejores y tampoco te prometo que un día me acercaré a ti y te hablaré, ni siquiera te prometo una palabra, pues no te puedo asegurar al 100% qué es lo que va a ocurrir conmigo de aquí a un tiempo más, pues ya sabes, somos seres bipolares.

Pero te puedo asegurar, con toda mi existencia, que llegará el día, mas pronto de lo que te imaginas, en que dé vuelta la página, en que por fin le pondré punto final a este capítulo de mi vida, a nuestra historia, a nuestra novela, a nuestro diario de vida, y podremos por fin pensar en qué haremos ahora, en qué será de nosotros.

Hoy, 21 de Marzo del 2004, sueño con verte un día tan feliz como siempre lo has deseado, en tu castillo de oro y mármol, mirando por encima del horizonte, sobre los campos de calas blancas y rosas rojas, cómo un caballero con su brazo en alto, te saluda a lo lejos, anunciando los buenos tiempos que se avecinan, en el reinado de nuestro Señor.

Hasta pronto.
Felipe.

No hay comentarios.: