martes, junio 24, 2008

Apocalipsis Ahora!


Quedan pocos días para que prendan el Gran Colisionador de Hadrones y ya he escuchado varias voces de alerta respecto al eventual peligro de que se forme un hoyo negro en la tierra o de que creen materia extraña que deje la cagá en parte del Universo destruyendo todo lo que hay a su paso. Aunque no es mi intención defender o atacar esta teoría alarmista, es la oportunidad ideal para divagar sobre ciertas cosas.

(Si no sabes lo que es el Gran Colisionador de Hadrones te invito a ver este video).

Nunca me olvidaré de un sueño que una vez tuve hace ya más de seis años en que de la nada aparecía una cabra chica de unos cinco años y que me decía que el mundo se iba a acabar el 2008". Me dió cualquier miedo, que con el paso de los días se convirtió en preocupación y finalmente derivó simplemente en algo más para justificar mi complejo de paranoia. Pero a principios de este año me acordé de aquello y luego supe lo del gran colisionador de hadrones.

¿Debería estar preocupado?, no sé, creo que sí, pero no lo estoy, de hecho me importa un pico... ¿debería sentirme culpable porque me importe un pico?, no sé, me importa un pico también.

Por todos lados veo a gente preocupada por el calentamiento global, que el planeta se está yendo a la cresta, que la caza de ballenas es horrible, que la juventud se degeneró completamente (incluso yo he dicho eeso), pero ahora que lo pienso... a la mierda con todo eso, nada importa en realidad.

Quizás es porque digo ser agnóstico, o quizás porque sí creo en Dios y en que todo eso esta mal, pero aún así no estoy ni ahí. Quisiera ver al amazonas en llamas, quisiera ver a Santiago en llamas, quisiera ver a la antártida en llamas y que se inunden miles de ciudades alrededor del planeta. Quisiera que el maldito colisionador de hadrones deje la cagada y que de hecho, forme un hoyo negro y nos trague a todos.

Quizás únicamente estoy chato porque tengo dos exámenes esta semana y no quiero que el reloj avance... pico con eso también, fuck it all, fuck this world, fuck everything that you stand for...

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miércoles, junio 04, 2008

"Piensa por tí mismo"


"Es mejor tener la boca cerrada y parecer estúpido
que abrir la boca y disipar la duda"
Mark Twain

Recuerdo un día que estaba en un carrete en Maipú y se me apareció un comunista. Cumplía con los requisitos del típico estereotipo de estudiante universitario marxista, a saber, pelo largo amarrado, polerón plomo barato, jeans azules gastados, zapatillas all stars, piel morena, una barba mal afeitada y una verborrea típica de estos especímenes. La cosa es que, como me gusta hablar de política en los carretes y mas aún si es con gente que no conozco, comenzamos a debatir sobre diversos temas de la contingencia nacional, cada uno atrincherado en su ideología, claro está. Por una parte yo haciendo mano de los mejores argumentos de la doctrina neoliberal y libertariana y él refugiandose en la "protección" que brinda un estado totalitario y en las consignas revolucionarias del Ché, Allende, Carlos Altamirano y otros más.

Al igual que con cada comunista que se me aparece en un carrete este tampoco parecía estar muy acostumbrado al debate con argumentos porque en más de una ocasión mostraba indicios de impaciencia esperando el inevitable momento en que nos agarraríamos a garabatos y tendría que llegar una masa de weones a separarnos cosa que finalmente no ocurrió y no tenía por qué ocurrir tampoco pues la primera regla para debatir es saber tolerar lo que dice el otro, además de no enojarse cuando está hablando y esperar que se le acaben los mejores argumentos para empezar a tirar los propios. Ocurrió que al rato, como siempre ocurre cuando me veo involucrado en estas contiendas ideológicas, terminamos tomándonos un copete juntos cagados de la risa tirando la talla y yéndonos cada uno por nuestro propio lado.

Pero hubo una cosa que no se me olvidó de las que él me dijo. Me dijo "la derecha chilena es tan poderosa porque controla todos los medios de comunicación de este país, radios, televisión, diarios, periódicos, etc." Recuerdo que yo le dije que aquello no era así, le enrostré la existencia de todos estos periódicos de izquierda que existen como Punto Final, El Siglo, Pluma y Pincel, El Siglo (en huelga) y algunos más moderados como Le Monde Diplomatique y La Nación. También radios como Cooperativa o incluso el canal estatal TVN, que si bien está formado por un directorio elegido por "todos los chilenos", cualquier persona con dos dedos de frente y que vea sus noticiarios se dará cuenta que tienen una tendencia comunicacional de favorecer las posturas oficialistas.

Él me dijo que si bien existían medios de izquierda estos no eran tan poderosos como El Mercurio o La Tercera. Le respondí que aquellos diarios no eran poderosos porque pertenecieran a tal o cual partido, sino que simplemente porque la gente los compraba considerándolos mas serios que cualquier otro diario. Además le dije que la gente no es weona (una manera poco sutil para referirse a aquél supuesto de la economía positiva que dice que las personas toman desiciones racionales) y que si compraban un diario en específico era porque lo preferían a los demás y le recordé la existencia efímera que tuvo el Diario Siete, el cual no quebró por culpa de la derecha, sino debido a que la gente no lo compraba, ergo, el diario no era demandado y por lo mismo las empresas nunca se la jugaron por publicitarse de manera estable en aquél medio.

¿Cuál de todos los motivos es el que mejor explica la razón de ser de esta introducción? Aquél que se refiere al por qué, ahora que lo pienso, yo estaba equivocado. Quizás no tan equivocado como él, pero equivocado al fin y al cabo. La gente sí es weona. Weona y muy manipulable. Weona, muy manipulable y lo que es peor, ignorante.

Quizás la razón directa del por qué y a través de qué llegué a esta conclusión es el debate que se ha instalado en Chile con motivo del fallo del Tribunal Constitucional que prohibió la entrega de la píldora del día después (levonorgestrel) a niñas mayores de 14 años en los consultorios públicos, siendo más específico, el detonante fué un día en específico, el martes 22 de Abril de este año.

Aquél día me sumé a una de las tantas manifestaciones callejeras que hubo, pero desde la vereda de la minoría, desde la vereda de enfrente del Ministerio de Salud ubicado en Mac Iver con Monjitas en donde yo junto a una masa considerable de jóvenes nos manifestábamos de manera pacífica, sin permiso de la Intendencia de la Región Metropolitana, a favor de la vida exigiendo que el MINSAL acatara el fallo del TC.

Aquél día vi, a ambos extremos de la calle, en el lado de nosotros que estábamos a favor de la vida y en el lado de los otros que estaban a favor de la píldora, mirándome a los ojos de manera furtiva, a la ignorancia. La maldita ignorancia me plantaba una misma mirada, pero cada vez que lo hacía usaba ojos distintos. A veces me miraba con los ojos de un niño de 14 años rubio, ojos azules, vestido de estudiante de colegio privado con un cartel que decía en la mano "DDHH del vientre hasta la muerte"; a veces lo hacía a través de los ojos de una señora gordita con el pelo corto y delantal blanco con una polera que decía "Por la libertad de decidir, NO a la dictadura del TC"; a veces me miraba con los ojos de una joven pelolais opus-dei que parecía que más estaba ahí para pasarlo bien y creerse rebelde que para sinceramente manifestarse por sus ideas; a veces me miraba con una mirada llena de odio hecha por un estereotipo de comunista que me gritaba improperios y no podía esconder su necesidad de golpear a alguno de nosotros.

La jornada terminó con la masiva manifestación que reunió a más de 15 mil personas en la Plaza Italia clamando por la liberación femenina, alzando condenas de dictadura, repudiando a la Iglesia Católica y abogando por la libertad de decidir. Obviamente no era mi tipo de manifestación.

Independientemente de las posturas ideológicas y creencias personales, ¿es posible hablar de 15 mil ignorantes reunidos en un lugar levantando pancartas sin sentido y gritando cosas sin tener idea de nada? La sola idea me provoca miedo y me hace perder en cierta manera la esperanza que tenía en la humanidad, pero intentaré no evadir el asunto.

Vivimos en una sociedad democrática y pareciese que nos sentimos orgullosos de aquello. Más que sociedad, en un orden mundial. Hemos sido testigos de cómo en el mundo se han iniciado guerras "en nombre de la democracia" como la ocurrida en Irak el 2003 y que, si bien fué condenada por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, diversas potencias mundiales la apoyaron.

Vivimos en una sociedad en donde el derecho a la libertad de expresión no pareciese encofarse en aquel derecho inherente que tenemos como seres humanos en sí, sino que se ve desde la perspectiva de "tienes la obligación de respetar lo que yo digo y haré que respetes aquello aunque deba obligarte destrozando todo a mi paso".

Vivimos en una sociedad donde ya no pareciese respetarse a la autoridad. No a la autoridad entendida como fuerzas de orden público, llámese carabineros e investigaciones, ni autoridad entendido como entes del Estado, llámese Presidenta de la República, sus ministros, los parlamentarios o los tribunales de justicia. Autoridad entendida como el viejo concepto romano de autóritas, de conocimiento, de sabiduría, de experiencia. Autoridad entendida como un grupo de viejos sabios a los que se les respeta y admira, no porque sean más fuertes, pues no lo son, no porque lo hagan infringiéndonos temor, pues en sus caras vemos reflejada la misma luz que emana de nuestros abuelos, no porque sean crueles y nos tengan subyugados, pues por una parte nadie permitiría eso de nadie y porque nadie tiene el derecho a subyugar a otros. Pero pareciese que ya no existe la autoridad y de existir, pareciese que no se respeta para nada y si se le respeta, siempre es con suspicacias.

Hace unos días venía en la micro de vuelta a mi casa y en el mismo terminal en que me subo a ella, tres pendejas de unos 14 años se subieron cagadas de la risa y se pararon junto a una señora de unos sesenta años que iba sentada visiblemente cansada por la jornada del día. Ocurre que una de estas pendejas saca su Nokia 5200 (el rojo que reproduce música a todo chancho) y, costumbre cada vez más común, se pone a escuchar Reggaeton desconsideradamente alto junto a ella. Obviamente la gran mayoría de los que estábamos ahí nos molestamos, pero como los chilenos nunca reclamamos niuna weá, nadie dijo nada. Nadie, a excepción de la señora que educadamente les pidió que le bajaran el volumen. El asunto es que estas pendejas de mierda hicieron exactamente lo contrario y, peor aún, sacaron otro celular y fueron webiando a la señora todo el rato (1 hora dura aproximadamente el trayecto) quien notoriamente estaba hasta más allá del pico. Todo el trayecto fué así, la señora pidiéndoles, ordenándoles y finalmente reclamándoles que o apagaran la weá o se fueran para atrás, pero estas plastas-de-juventud-futuras-limpiadoras-de-wáters la insultaban y se reían. Maldición, si yo hubiera sido el padre de cualquiera de ellas las hubiera bajado a patadas en el hocico de la micro y a correazos me la hubiera llevado arrastrándose por el barro hasta mi casa. ¿Dónde quedó el respeto hacia nuestros mayores?, ¿donde quedó el respeto hacia la autoridad?

Este año se celebraron los cuarenta años del Mayo del 68', fecha en que se impuso el relativismo en todo el mundo, en donde dejó de haber una sola opinión válida y aparecieron miles, qué, millones de opiniones válidas contándose cada una por cada habitante de la sociedad. Estoy de acuerdo, cuando hay una sola opinión válida, vivimos en el totalitarismo, lo que es malo, pero cuando hay millones de opiniones válidas es lo mismo que decir que ninguna opinión es válida, pues éstas se anulan entre sí, lo que es peor que el caso anterior pues decimos que hay anarquía, desorden, intolerancia y lo más trágico, una completa falta de certeza sobre qué es lo real, lo cierto, lo tangible, lo mejor y lo contrario a todo esto.

Entre tantas ideas de pronto se me viene a la mente una frase de cajón que usaba antes a cada rato, "Think for Yourself - Question Authority"... ahora que lo pienso, al vivir con esa máxima en la mente lo único que hacía era permitir que otro pensara por mí. La frase estaba inserta en las líricas de una canción de Tool y, por ser aquella mi banda favorita, vivía convencido de que si cuestionaba a la autoridad, ergo, si no la respetaba y me la pasaba por la raja, era más inteligente que los demás, todo debido a que otro weón, tanto o más ignorante que yo, profesaba aquél estilo de vida. Mierda, por pensar aquello me expulsaron del colegio. Por pensar aquello mi mente fué manipulada, no por una persona, sino que por un eslogan, algo sumamente peor pues carece de vida, de organicidad y es sólo la suma de unas cuantas palabras que unidas producen una reacción efectista e inmediata en quien la escucha.

Desde esta perspectiva entonces es que veo lo que ocurre a mi alrededor y siento lástima, repudio, desesperación, impaciencia, ansiedad, ira. ¿cómo es posible que a partir de simples eslogans se pueda convocar a una masa de 15 mil weones en unos pocos días? Claro, "No a la dictadura del Tribunal Constitucional" es una excelente frase pues, como dirá mi amigo Skroll tiene inserta la palabra dictadura, en consecuencia, salgamos a las calles a romper todo, a repudiar a la derecha por apoyar al Asesino, a repudiar a la Iglesia por meterse en lo que no le corresponde y a repudiar a los cuicos porque ellos tienen plata y yo no y pueden comprar la pastilla cuando quieran. Me ocurrió a mí, no necesito más pruebas... si a mí un eslogan me influyó tanto es porque realmente esto sucede... no debería extrañarme entonces de que le haya ocurrido a más de 15 mil personas tampoco.

Pero esto va más allá de la pastilla del día después, de hecho sólo usé este hecho como un ejemplo ilustrativo ad hoc al momento en que vivimos y del cual todos tienen constancia de que es algo importante que transcurre en el acontecer de nuestro país. Esto mismo lo puedo ver en todo lo que está ocurriendo en estos días con la Ley General de Educación. Déjenme pensar en algunos eslogans o frases de choque que he visto en carteles, stencils y grafitis por santiago estos días...

1) "No a la lacra del lucro"

2) "El que no para la vende"

3) "El cobre por el cielo y la educación por el suelo"

4) "LGE: La Gran Estafa"

5) "De la reflexión a la axión por la edukación"

6) "Contra la educación mercantil a la ofensiva popular y estudiantil"

Existen más, es cierto, es cosa de pegarse una vuelta por el centro para darse cuenta de aquello. Todos eslogans, todas frases fáciles y efectistas, todas consignas casi apocalípticas, pero, igualmente, todas frases vacías de contenido, pegadizas en su forma, pero huecas en su fondo. Recuerdo las primeras movilizaciones, las del 2006. Incluso las apoyé, pues fueron espontáneas, surgieron realmente del descontento debido a la falta de infraestructura, a la falta de calidad, al apestamiento de los estudiantes de ver cómo sus colegios se caían a pedazos y de cómo el estudiar en donde estaban estudiando no les proveería ningún futuro prometedor. Todo aquello lo respeto, no daba para más. ¿Cuáles son las demandas este año?, me referiré únicamente en esta ocasión a la segunda petición de la FECH (todo esto extraído de la página de la FECH)

2) Retiro del parlamento de la LGE, fin al a la LOCE, reemplazo por un proyecto de ley que surja desde los actores involucrados en educación y de la ciudadanía. Proponemos un plebiscito Educacional para definir la propuesta de Educación pública para el siglo XXI.

R: ¿Un plebiscito?, aquí se ve, en todo esplendor a lo que me refiero en este post con que no se respeta a la autoridad. ¿Qué idea van a tener, con todo respeto, la señora del negocio de la esquina, el que recién cumplió 18 años y que viene saliendo del colegio o el chofer que se lo pasa todo el día arriba de una micro recibiendo puteadas de los pasajeros sobre qué es lo mejor para solucionar la educación del país? Al respecto, unas sabias palabras del economista Ernesto Fontaine ("Nuestra economía de cada día", pag. 317, editorial Alfaomega, 2000):

"Si un médico determina que la solución más eficiente para resolver los problemas de una paciente es hacerle una mastectomía, quizás sea una buena idea pedir la opinión de una "junta de médicos" profesionales y bien adiestrados en el tema, cuyo mayor interés esté en el bienestar de la paciente y cuya única retribución sea el orgullo de haber hecho un buen diagnóstico y "hacer las cosas bien", conforme a los conocimientos que tienen de su ciencia y profesión. Me parecería pésimo que el asunto se sometiera a la consideración democrática de otras personas con intereses y conocimientos diversos, algunas de las cuales quizás poco o nada tienen que ver directamente con el bienestar de la paciente. De esa consulta saldría "cualquier cosa"; alguno, que quiere maximizar los honorarios del cirujano y que sólo es pariente político (y no carnal) de la paciente, podrá proponer que le extirpen ambos pechos y también los ganglios pertinentes; otro propondrá no hacer nada por el momento, quizás porque de esa forma continuará consultándole a médicos amigos, seguirá comprando medicamentos en su farmacia y se le evitará (postergará) el trauma a la paciente y habrán otros que estén de acuerdo con los técnicos. ¡Sin duda que esto a usted le parece mal, pues la salud de la paciente no es materia de discución democrática y la verdad (en estas materias técnicas) no está en la mayoría!".

El mensaje es, entonces, que no siempre podemos tener la razón en todo, pues siempre va a haber alguien que sepa más que nosotros sobre respectiva materia, es imposible que ocurra lo contrario pues no disponemos de tiempo infinito para internalizarnos en todos los temas y ciencias del mundo, el hombre es un ser mortal, por lo mismo, semejante tarea es utópica.

Estoy en contra de aquellos que desde la vereda de la ignorancia intentan involucrarse en algo que no les compete. Yo como estudiante de Derecho no tengo por qué ir a meterme a discuciones relativas a la astronomía, pues no tengo la más mínima idea, pero por lo mismo, tampoco puedo permitir que un Ingeniero venga a involucrarse en materias jurídicas, pues por más que tenga derecho a opinar, por más que exista la libertad de expresión, principios todos de la democracia como nos la han intentado vender, aquél ingeniero no será más que un ignorante de mierda y como dice uno de mis eslogans favoritos "El hombre que no está informado, no puede tener opinión. Y el que no tiene opinión, no puede tomar desiciones".

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