jueves, octubre 13, 2005

Pandemia, o sea, tú mueres


Ya no le tengo miedo a la muerte y es por eso que reconozco todos los hechos que mencionaré a continuación. Siempre lo dije. Siempre lo digo. La Humanidad está en vías de extinción, pero aún la mayoría de la población no lo sabe.

El descontrol tecnológico. El calentamiento global. La explotación de los recursos naturales. La deforestación. El derretimiento de los polos. La avaricia. El egoísmo. Todos elementos que están ahí, latentes a diario, día a día, acechándonos, observándonos, esperando el momento indicado para atacar, para decir "Cagaron".

Todo lo que mencioné son elementos provocados por el propio ser humano. Ya no basta con extinguir al Rinoceronte Gris, ni a las Ballenas Azules, ni a los Osos Polares ni al Cóndor Chileno. Nos estamos extinguiendo a nosotros mismos. Somos nuestros propios victimarios. Me incluyo. Pero lo merecemos.

El mundo se va a acabar, el mundo se va a acabar. La humanidad se va a ir por el retrete. Nos estamos yendo por el retrete.

Si han leído un poco más atrás en mi blog se habrán dado cuenta que creo en la llamada Ley del Karma, la ley de la acción y reacción, del crimen y del castigo, de la bondad y la recompensa. Ya bastante daño le hemos provocado al planeta Tierra, hemos acumulado demasiado Karma negativo. Es tiempo de equilibrar las energías cósmicas que mueven al planeta y al universo.

Y esto no es algo que escribo pensando en que podría ocurrir en un futuro no muy preciso y lejano. Está ocurriendo AHORA MISMO, ahora, mientras estás leyendo estas líneas. Ejemplos:

Ciudades que quedan completamente bajo el agua. Huracán Katrina, Rita y Stan en Centro y Norte américa. Ciudades que quedan completamente bajo escombros. Terremotos y réplicas en el Medio Oriente y Asia. Personas y destinos que se cruzan en lugares y tiempos equivocados. Ataques terroristas en todo el orbe. Gente que goza de la tecnología y que se jacta de los logros de la "Inteligencia Humana". Aviones que caen y se accidentan con una frecuencia nunca antes vista. Y lo más asombroso de todo. Organismos microscópicos del pollo poniendo en peligro a millones de vidas humanas. La mortífera y letal Gripe Aviar.

El hombre, que se jacta de ser el ser más inteligente de la creación, inesperadamente, repentinamente, se ve amenazado por un simple animal de corral. Al menos los que no comen pollo por fin tendrán argumentos para recriminar a sus esposas cuando éstas lo preparan al almuerzo.

Gripe Aviar, la enfermedad que "en cualquier momento puede transformarse en Pandemia", según la Organización Mundial de la Salud. Un ejemplo sacado del diario El Mercurio. En Chile somos 15 millones de personas. Cuando se desate la catástrofe por lo menos 5 millones de nosotros nos infectaremos. Así de simple. Un tercio de la población chilena quedará amenazada de muerte sin poder culpar a nadie. ¿Qué te hace creer que a tí no te tocarán las garras de la muerte?.

Estáis avisados. Ahora sólo les queda correr y esconderse. Y alegrarse, sí, alegrarse y sentirse felices. Felices porque nuestra generación podrá ver en exclusiva y en primera fila la extinción de nuestra propia especie. Yo mientras voy a comprar Pop Corn y una bebida gigante, ya que no me quiero perder nada del espectáculo que está a punto de desatarse.

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