lunes, septiembre 01, 2003

Si sólo supiera escucharme

Hoy es el día en que la cuenta vuelve a cero. Hoy es el día en que mi cabeza explota en un remolino de colores y gritos. Libertad. Me aburrí, pero no. No es eso. Me harté. Será un hasta aquí no más llegamos y si te he visto no me acuerdo.

Necesité 405 días para sacarte de mi cabeza Sofía. Ya me aburrí, y así como esta fue la primera vez que sé la fecha exacta en que me enamoré, también sabré la fecha exacta en que dejé de hacerlo. Del 23 de Julio del 2002 al 31 de Agosto del 2003.

Se ha terminado todo este proceso, ya no sigo enamorado de ti, pero me sigues atrayendo con tu forma de ser. De la misma manera en que me atrae la Clau.

Sin embargo, debo agradecerte muchas cosas. Debo disculparme por muchas más. Pero lo mejor de todo, es que al menos ahora, me siento capacitado para algo que quizás tú ya no quieras. Me siento capaz de ser tu amigo y no confundir más las cosas. Pero cuidado. Tú no me conoces como amigo, así que no te hagas muchas ilusiones. Puedo ser el hombre más perro del mundo en esa materia como también el más simpático. Todo depende de cómo me recibas.

Por fin me salí de este juego. Por fin se acabó todo. Creo que ahora puedo desatarme esta soga del cuello y respirar tranquilo, pero aún no siento el aire puro en mi.
Factores directos y más cercanos que produjeron esto:
*Mi reencuentro con gente de mi pasado y mi encuentro con gente que podría ser parte de mi futuro.
*La claridad mental que alcancé el viernes luego de esos pocos tragos de pisco.
*Un lavado de cerebro extremo.
*Mi amiga Claudia, mi amiga Rebeca y sobre todo, mi amiga Thayse.
*El rencor acumulado.

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